Historia
Rastro de la Ciudad de México
Construcción
La historia del Mercado Unidad Rastro o "Mercado del Rastro" se remonta al siglo XIX, cuando los mataderos, basureros, cementerios, penitenciarias, hospitales, y cualquier foco de potencial infección para la seguridad de la población fueron relegados a la periferia de la Ciudad, en la siguiente imagen, se observa dentro de la zona amarilla marcada con la letra "F", el lugar en donde se asento el Rastro de la Ciudad de México, lugar que ocupaban la caballerizas de la Antigua Hacienda de Aragón.
Litografía de la Ciudad de México en perspectiva, realizada por Casimiro Castro en 1855 . Debe considerarse que el mapa es una obra que a pesar de ser una fiel representación de la epoca, no guarda las escalas y proporciones de un mapa de la actualidad.
El Rastro de la Ciudad de México, fue uno de los proyectos que fue pensado en la modernidad a la que Porfirio Díaz quería posicionar a México, pero este no tuvo la importancia de otras edificaciones de la época, las razones pueden ser varias, de entre las que hacen mas sentido, el poco glamur que una instalación de este tipo representaba para la Ciudad, contraria a otras edificaciones de la época. La Construcción inicio El jueves 28 de mayo de 1885 y por diversas circunstancias inherentes de una obra que inicio con muchas dificultades. Fue así como la obra se concluyo en 1895, sin embargo no tenia vías de acceso, por lo que este se encontraba aislado a la periferia de la Ciudad, la unica forma de llegar a este era a pie, a caballo sobre un carruaje. ya que toda la periferia se encontraba en una zona fangosa.
Porfirio Díaz entrando al Rastro de la Ciudad de México para su reinauguración.
La imagen corresponde al 25 de Febrero de 1905, se Observa a la comitiva de Porfirio Díaz, entrando a las instalaciones del Rastro , por la entrada de Inguaran hoy Congreso de la Unión.
Llanos y la zona pantanosa de la Hacienda de Aragón
Al fondo, Se alcanza a distinguir el Cerro de Chiquihuite y el Cerro del Zacatenco, Dirección Norte, en este sitio actualmente se ubican colonias como la 20 de Noviembre, la imagen es de 1900
Hombres posando en la entrada del Rastro de la Ciudad.
Se observa que el número corresponde al 31, posiblemente al 31 de la calle de Inguaran, La imagen corresponde al año 1920
Rastro de la Ciudad, Sobre la calle de Aluminio
De lado derecho se observan algunos autos, La imagen corresponde al 3 de Marzo de 1927
Capilla frente al rastro
se utilizaron dos imágenes la primera de la izquierda 1920, la segunda 1927, se observa la capilla sobre el parque infantil, que se encuentra frente a la avenida hoy Congreso de la Unión, la segunda sobre la calle de Aluminio, al fondo el Antiguo Rastro
Funcionamiento y Actividades
Como se ha mencionado, los inicios del Rastro de la Ciudad de México, no fueron los mejores para una construcción que se contemplaba moderna, uno de los motivos de la elección de la ubicación en donde se construyo, obedece a factores que deben ser analizados, como lo es el que se contemplaba mover la ubicación del rastro ubicado en el mercado San Lucas, justo en el primer cuadro de la Ciudad, El nuevo rastro contemplaba sacar del primer cuadro, los malos olores, y la mala imagen que este rastro y otros mataderos dentro de la urbe le daban, argumentando tambien la salud publica.
Se contemplaba que la reubicación de los mataderos y sus trabajadores, fueran organizados en la gran construcción proyectada a las afueras de la Ciudad, Fue así como inicio una de las épocas de crecimiento de la urbe que inicio a principios del siglo XX hasta mediados de los años 60.
Los trabajadores que llegaron a laborar en el Nuevo Rastro, desde el comienzo en su primera inauguración ya manifestaban inconformidades por la lejanía de su nuevo centro de trabajo, así como las condiciones que este presentaba, pues a pesar de no encontrarse las instalaciones concluidas este comenzaría a funcionar en 1897, por lo que la gendarmería hacia acto de presencia desde el primer momento de su apertura.
Por lo que el 3 de Octubre de 1897 se tuvo que clausurar el Rastro, con lo que los trabajadores regresarían nuevamente a sus antiguos lugares de labores.
Después de reinaugurado el rastro en 1905 a pesar de que aun faltaban obras dentro de este por terminar, así como algunas instalaciones que nunca funcionaron como lo fue el crematorio, o la falta de desagües que funcionaran como se había proyectado, fueron algunas de las causas que los trabajadores enfrentaban para el desarrollo de sus actividades.
Que a la postre mantenían en situación precaria la fuerza laboral y las condiciones de los trabajadores, siendo la semilla de futuras manifestaciones y huelgas que mantendrían al rastro de la Ciudad con constantes cierres y manifestaciones.
Trabajadores dentro de uno de los pozos tomando un baño con sus familias 1930
Cargador de Carne, trasladando un cerdo para su despiece, posando junto a un niño tablajero 1920
Tablajeros, junto a un toro, algunos de ellos sin la vestimenta necesaria. 1925
Manifestación de tablajeros frente a el Rastro de la Ciudad de México 1940 Calle de Inguaran, hoy Congreso de la Unión
La mayoría de los trabajadores del Rastro de la Ciudad de México, fueron los que comenzaron a habitar las zonas aledañas a este, iniciando así las primeras colonias que abrirían paso al poblamiento de las zonas que antes eran terrenos baldíos, estanques de agua y fango.
Instalaciones del Rastro de la Ciudad de México 1932
En la imagen se puede observar claramente el tamaño del rastro de la Ciudad, que ocupaban el polígono delimitado por las calles de Aluminio, Esquina con Inguaran, Esquina con platino, Esquina con Eduardo Molina. Aun no existía el Parque Plutarco Elías Calles, y el Rio Consulado aun no se encontraba entubado, a lado del rastro en la esquina de inguaran y aluminio se encuentra una edificación que contiene varios comercios, lo que hoy sería la cantina "La Mascota", Al fondo en la parte superior, se puede observar la Colonia Romero Rubio.
Podemos apreciar que las colonias alrededor del mercado estaban despobladas a inicios de los años 30.
Las constantes huelgas, el mal funcionamiento del Rastro, el crecimiento de la Ciudad y la falta de visión en la superpoblación de esta, ocasiono que para principios de los años 50, se proyectara un nuevo Rastro en la zona de Ferrería, en Azcapotzalco. Así como la planeación de una nueva modernidad impulsada por Adolfo López Mateos y Ernesto Uruchurtu, con la construcción de centenares de mercados, vialidades y obras publicas, ocasionaron que el Rastro de la Ciudad de México Cerrara sus puertas en 1954 y ese mismo año fuera demolido, para dar paso a la construcción del Hospital Infantil Inguaran, La primaria Batallón de San Blas, La Secundaría Maestro José Calvo Saucedo 64, el mercado que a la postre heredaría el nombre del "Mercado Unidad Rastro". Fueran algunas de las Obras que sustituirían al mal logrado Rastro nuevo, que se convertiría en el segundo Rastro Viejo.
Tablajeros del rastro durante un mitin 01-05-1939
Manifestación de tablajeros en contra del hambre frente a el rastro de la Ciudad de México 1940
Mitin realizado en el interior del rastro de la Ciudad de México 1940
Tablajeros en las escalinatas del rastro, retrato de grupo 1935
Era moderna
El 20 de Julio de 1963, Adolfo López Mateos y Ernesto P. Uruchurtu encabezarían la delegación que inaugurarían diferentes edificaciones en la zona en la que se encontraba el Rastro de la Ciudad de México. Dando paso a una nueva época, en la que se pretendía el orden, la modernidad y el progreso.
Los mas de 600 locales del Mercado Unidad Rastro número 25, fueron entregados a los antiguos trabajadores que quisieran del Rastro, así como se les dieron las facilidades de adquirir cedulas a los vendedores ambulantes que se encontraban en los alrededores de la antigua edificación.
Vendedores ambulantes en la calle aluminio en el rastro 1910
Adolfo López Mateos con su comitiva recorriendo mercado que inauguro en el Distrito Federal 1963
Adolfo López Mateos con funcionario visitando mercado durante la inauguración del mismo, en el Distrito Federal 1963
A pesar de las acciones de las autoridades en diferentes épocas, para regular el comercio informal, establecer lugares para el comercio , generar las condiciones que propicien un ordenamiento vial. No se aprecia una mejora alrededor de lo que fue el Antiguo Rastro, sus alrededores continúan con vendedores ambulantes, al mismo tiempo en calles cercanas, se continua con la venta de carne que se despieza en los domicilios hoy adaptados para el tratamiento de la carne. Hoy el Mercado Unidad Rastro, presenta un grave deterioro en sus instalaciones, por el abandono de las autoridades y la mala organización de los comerciantes. A 60 años de su inauguración, existen muchas dudas sobre el camino que deben tomar las autoridades y a la vez incertidumbre de los propios comerciantes, pues diversas administraciones, han intentado asfixiar el comercio, para cerrar este y otros mercados, para establecer empresas transnacionales de supermercados. Con todo y esto, el Mercado del Rastro continua en pie, los locatarios establecido en su interior, así como los tianguistas de las calles alrededor, ya van para la cuarta generación establecida en las hoy populares colonias aledañas.